fotografia - fotoperiodismo - artíticas - eventos

sábado, 25 de diciembre de 2010

autenticidad


A veces parece que la vida nos rete a jugar a ser cebollas andantes, y cuanto más grande mejor. Nacemos sin capas y envejecemos con muchas... figura que para protegernos. Pero con tanta capa al final uno no sabe como regresar así mismo (yo creo q hay gente que ni es consciente que es una cebolla andante).


Las grandes cebollas andantes precisamente rechazan en forma de capas todo aquello que se sale de lo normal, unos lo llevan más adentro que otros. La vulnerabilidad en este juego no es cabida. De tanto en cuanto sentirse loco y raro es necesario. Las cosas que no encajan dentro de un medio son más interesantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario